Título original: Scream 3.
País: Estados Unidos.
Año: 2000.
Director: Wes Craven.
Guión: Ehren Kruger.
Reparto: Neve Campbell, David Arquette, Courteney Cox, Patrick Dempsey, Scott Foley, Roger Jackson, Parker Posey, Deon Richmond, Emily Mortimer, Jenny McCarthy, Matt Keeslar, Lance Henriksen, Patrick Warburton, Josh Pais, Lawrence Hecht, Liev Schreiber, Kelly Rutherford, Jamie Kennedy, Heather Matarazzo, Carrie Fisher.
Duración: 116 minutos.
«Puñalada 3», la tercera parte de la saga «Puñalada» basada en el libro sobre los asesinatos de Woodsboro escrito por Gale Weathers (Courteney Cox), se rueda en un estudio de Hollywood pero pierde a uno de sus actores, Cotton Weary (Liev Schreiber) quien fue erróneamente acusado al principio por Sidney Prescott (Neve Campbell) de haber matado a su madre Maureen y que ahora ya tiene su nombre más que limpio y mucho dinero. Él y su novia son asesinados y cuando otra de las actrices de la película sufre en sus carnes a Gostface, el estudio cierra la producción.
Parece que alguien sigue las muertes en el orden del guión y Gale Weathers está dispuesta a descubrir quien con ayuda de a quien Dewey (David Arquette) ayuda a proteger, la Gale Weathers de la película, Jennifer Jolie (Parker Posey).
El pasado pega a Sidney en la cara una vez más cuando se descubren nuevos datos sobre su madre y la chica acabará de nuevo enfrentándose al asesino de la máscara y del cuchillo que tiene más que pensado el guión que todos deben seguir.
«Scream 3» es inferior a sus predecesoras pero hay que tener en cuenta que esta vez su guionista no fue el mismo y se nota en especial porque a veces resulta bastante paródica y porque no hay demasiadas referencias cinéfilas. Pero lo del cine dentro del cine el señor Craven lo sabe hacer muy bien (y en reincidente en ello) y compone unas escenas muy interesantes.
Hay más humor en «Scream 3», muchos más gritos, menos escenas de Sidney y un asesino con un motivo que nunca acabará de convencerme y ahí es en lo que falla la película para mí aunque, tiene escenas que merecen mucho la pena. El inicio está bien y toda la secuencia final en la casa me parece buena.
No será tan buena como las anteriores, no, pero se pasa un buen rato con la que iba a ser la última película de una gran saga. Atención a la divertida escena de Carrie Fisher y a cameos como los de Roger Corman, Kevin Smith o el propio Wes Craven una vez más.