Título original: S.W.A.T.
País: Estados Unidos.
Año: 2003.
Director: Clark Johnson.
Guión: David Ayer, David McKenna.
Reparto: Colin Farrell, Samuel L. Jackson, LL Cool J, Jeremy Renner, Josh Charles, Brian Van Holt, Michelle Rodriguez, Reg E. Cathey, Olivier Martinez, Larry Poindexter, Domenick Lombardozzi.
Duración: 112 minutos.
Jim Street (Colin Farrell), miembro de los S.W.A.T. de Los Ángeles, acaba en armamento teniendo una especie de trabajo de oficina después de que su compañero Brian Gamble (Jeremy Renner) desobedeciera órdenes. Brian acaba fuera del cuerpo y Jim con otra oportunidad de regresar al equipo de armas y tácticas especiales. Aunque su jefe, el capitán Fuller (Larry Poindexter) no se lo pone fácil.
Ahí es cuando entra en acción uno de los pesos pesados del cuerpo, el sargento Dan «Hondo» (Samuel L. Jackson), su apellido es Harrelson pero no lo dicen en el filme, a quien encargan crear un equipo de cinco personas y no tarda es fijarse en Street quien acabará entrenando con quienes serán sus compañeros: dos viejos conocidos, T.J. McCabe (Josh Charles) y Michael Boxer (Brian Van Holt); y dos nuevos en el cuerpo, Chris Sanchez (Michelle Rodriguez) y Deacon «Deke» Cay (LL Cool J).
Cuando de la manera más estúpida la policía de Los Ángeles atrapa a un criminal buscado en varios países, Alex Montel (Olivier Martinez), el grupo de «Hondo» será el encargado de trasladarle a una prisión federal pero se encontrarán con quienes quieren los 100 millones que Montel promete a quien le libere.
Basada en la serie que entre 1975 y 1976 emitió ABC en Estados Unidos llamada simplemente «S.W.A.T.» y conocida en España como «Los Hombres de Harrelson», que fue un spin-off de otra serie de la misma cadena producida igual que su secuela por Aaron Spelling y Leonard Goldberg de nombre «The Rookies», «S.W.A.T.: Los Hombres de Harrelson» es una entretenida película sin otra pretensión que hacer que el espectador la siga y sin caer en la parodia, como otras adaptaciones de series de televisión, en ningún momento.
Lo mejor del filme es ver cómo se forma el grupo y demás porque la trama del malo de turno, un tipo sin carisma alguno, es muy blanda. Tal vez sea más que previsible lo que sucede hacia el final del metraje pero no por ello pierde el interés para ver cómo se las apañan estos miembros del S.W.A.T. para salvar la situación.
Tiene algunas escenas interesantes de acción, pero se estrella en lo que a desarrollo de personajes se refiere metiendo alguna cosa como las historias de familia de los personajes, breves pero nada importantes, y lo de la novia de Jim que sobran. También sobra bastante poner a Michelle Rodriguez en el grupo porque ni rebaja el nivel de testosterona, ni contribuye a crear ninguna tensión sexual con Colin Farrell, y a la hora de la verdad tampoco es que haga demasiado aunque el protagonismo se lo llevan, sobre todo, los amigos Farrell y Jackson.
Lo dicho, entretenida para pasar un buen rato sin más.