Título original: Take Shelter.
País: Estados Unidos.
Año: 2011.
Director: Jeff Nichols.
Guión: Jeff Nichols.
Reparto: Michael Shannon, Jessica Chastain, Tova Stewart, Shea Whigham, Katy Mixon, Ron Kennard, Heather Caldwell, LisaGay Hamilton, Kathy Baker.
Duración: 121 minutos.
Curtis (Michael Shannon) empieza, de la noche a la mañana, a tener pesadillas y alucinaciones. Sueña, por ejemplo, que su perro Red le muerde el brazo o que yendo en coche con su hija Hannah (Tova Stewart) unos hombres se la llevan y le hacen daño a él. También ve lo que parece que nadie más ve, cómo los pájaros se mueven de manera extraña en el cielo.
No le dice nada a su mujer Samantha (Jessica Chastain), y va a ver a un médico para que le recete algo y a su madre Sarah (Kathy Baker), esquizofrénica desde los treinta para que le cuente cómo empezó su enfermedad y es que Curtis piensa que eso es lo que puede tener.
Su comportamiento y sus pesadillas van de mal en peor y lo arriesgará todo, su trabajo, sus amistades, el implante que espera su hija sorda y hasta su matrimonio cuando se ponga a construir un refugio para la tormenta que cree que está a punto de llegar.
El segundo filme de Jeff Nichols, segundo también con su muso Michael Shannon, «Take Shelter» recibió numerosos premios y nominaciones y fue alabado por la crítica. Lo mejor, desde luego, está en la interpretación de su protagonista absoluto ya que Shannon aparece en el 99% de las escenas de la película, porque a mí particularmente la película me ha parecido tirando a mala.
Ni intriga, ni terror como la sinopsis oficial me dio que pensar es lo que he encontrado en «Take Shelter», sino un drama en el que un hombre empieza a tener esas alucinaciones y pesadillas de las que hablaba sin saber por qué y sin que al final nosotros, los espectadores, tampoco lo sepamos. Ni tan siquiera da la sensación de lo que parece que quieren hacernos creer, que todo el mundo piense que Curtis está loco como él mismo dice. Paranóico en todo caso se le puede ver pero más no.
No, a mí no me ha gustado y no perdería el tiempo de nuevo con ella, de hecho el fast forward del mando funcionó bastante bien para que llegara al final. Un final que al menos cierra bien la narración aunque te de la sensación de que tanto rollo para eso que sucede.