Título original: Mama.
País: Canadá, España.
Año: 2013.
Director: Andy Muschietti.
Guión: Neil Cross, Andy Muschietti, Barbara Muschietti.
Reparto: Jessica Chastain, Nikolaj Coster-Waldau, Megan Charpentier, Isabelle Nelisse, Daniel Kash, Javier Botet, Jane Moffat, Morgan McGarry, David Fox, Dominic Cuzzocrea, Maya Dawe, Sierra Dawe.
Duración: 100 minutos.
Jeffrey Dessange (Nikolaj Walder-Costau) comete unos asesinatos, coge a sus hijas y se las lleva. De camino a cualquier parte, sufren un accidente de coche y acaban en una cabaña. Pero no están solos, hay alguien más ahí y Jeffrey desaparece.
Cinco años se pasa su hermano Lucas (también Nikolaj Coster-Waldau) buscando a los tres y justo cuando su dinero se agota, los buscadores dan con el coche, la cabaña y las dos niñas, Victoria (Megan Charpentier) y Lilly (Isabelle Nelisse) que se han convertido en dos salvajes.
El doctor Gerald Dreyfuss (Daniel Kash) se encarga de su caso y cuando las niñas están algo mejor para que Lucas y su novia Annabel (Jessica Chastein) se las puedan quedar, les ofrece una casa para estudios donde él podrá seguir llevando su caso a pesar de las quejas de la tía de las niñas, Jean (Jane Moffat).
Victoria y Lilly hablan mucho de mamá y Dreyfuss piensa que tal vez la primera por ser la mayor ha adoptado ese rol. Pero ¿existe realmente mamá? Dreyfuss investigará hasta descubrir una historia de años atrás. Las niñas juegan con alguien, Annabel trata de acercarse a ellas pero no lo tiene fácil y menos cuando Lucas acaba en el hospital. Y todo se complicará cuando la extraña presencia se vuelva cada vez más real.
Miedo no da «Mamá», tampoco tiene momentos de susto, tal vez para los susceptibles sí pero esos momentos ya se ven llegar de lejos, pero la historia está bien planteada y bien realizada. Las niñas resultan inquietantes a veces y Jessica Chastain demuestra lo camaleónica que es yendo aquí de estrella del rock reconvertida en mamá a la fuerza.
La fotografía está muy bien y la música acompaña bastante aunque Mamá resulta ser algo extraño como la Niña de Medeiros a la que Javier Botet dio vida en la saga de terror español «REC», igual que hace aquí a esa omnipresente protagonista. Me ha gustado «Mamá», sí, pero el final no me ha convencido del todo aunque en realidad, pensándolo dos veces resulta muy congruente con todo lo que se ve y por cómo es la historia de mamá. Recomendable.