Título original: Barefoot in the Park.
País: Estados Unidos.
Año: 1967.
Director: Gene Saks.
Guión: Neil Simon.
Reparto: Jane Fonda, Robert Redford, Charles Boyer, Mildred Natwick, Herbert Edelman, Mabel Albertson, James Stone.
Duración: 105 minutos.
Paul (Robert Redford) y Corie (Jane Fonda) Bratter son unos recién casados que tras pasar seis días de luna de miel encerrados en un hotel de Nueva York se disponen a empezar su vida juntos en el quinto piso (sin ascensor) de un minúsculo apartamento en Manhattan. Su pasión inicial no tarda en difuminarse principalmente porque, por enamorados que estén, son muy diferentes.
Paul es abogado desde hace poco y pretende empezar a tener casos importantes. Es un buen tipo, se nota y su mujer lo sabe, pero es tirando a conservador y aburrido. Corie, sin embargo, es todo lo contrario. Divertida y vivaz son dos adjetivos que definen bien a esta mujer que parece respirar cada segundo de su existencia y vivir las experiencias de la misma a tope para no perderse nada. Su propia madre, Ethel (Mildred Natwick) afirma con un hilo de orgullo que desde los diez años la chica no se ha dejado aconsejar por nadie.
Ethel entra en la ecuación de la historia, al igual que el peculiar vecino de la pareja, Victor Velasco (Charles Boyer). Ambos acompañarán a los Bratter en alguna ocasión, momentos en los que la pareja a pesar de junta acaba más que distanciada porque no les gustan las mismas cosas. Pero ¿superará su amor todos los obstáculos que se van encontrando?
Para saberlo hay que ver esta delicia escrita por Neil Simon para el teatro antes de guionizarla para la pantalla grande. «Descalzos en el Parque» es una comedia con bastantes dosis de ironía que cuenta con la inevitable parte romántica, al fin y al cabo los protagonistas son unos recién casados que empiezan su convivencia conociéndose más bien poco.
El guión está muy bien haciendo la historia amena e interesante de principio a fin, y el reparto, brilla. Jane Fonda y Robert Redford demostraron tener química y sus escenas funcionan a la perfección, pero secundarios de auténtico lujo son Mildred Natwick y Charles Boyer que los complementan, y se complementan, de una forma fantástica. De hecho, Natwick fue nominada al Oscar a la Mejor Actriz de Reparto.
Un clásico estrenado hace cincuenta años que sigue en plena forma y que es de visión obligatoria para cualquier amante del cine. Me repito pero sí, «Descalzos en el Parque» es una auténtica delicia.