Título original: It.
País: Estados Unidos.
Año: 2017.
Director: Andy Muschietti.
Guión: Chase Palmer, Cary Fukunaga, Gary Dauberman.
Reparto: Jaeden Lieberher, Sophia Lillis, Jeremy Ray Taylor, Finn Wolfhard, Jack Dylan Grazer, Chosen Jacobs, Wyatt Oleff, Bill Skarsgard, Nicholas Hamilton, Jackson Robert Scott.
Duración: 135 minutos.
Derry, Maine. Un pueblo tranquilo normalmente, aunque no para todos, donde cada veintisiete años un payaso de otro mundo vuelve para alimentarse de niños. Buenos o malos, a él le da igual, mientras consiga aterrorizarlos y llevarlos a su terreno. es un monstruo que se hace llamar Pennywise (Bill Skarsgard) y que empieza su nuevo periplo en octubre de 1988 llevándose al pequeño Georgie Denbrough (Jackson Robert Scott) dejando a su hermano mayor Bill (Jaeden Lieberher) como la única persona visible a quien le importa lo que le sucedió. Y es que en Derry a los adultos parece importarles nada lo que sucede, se limitan a seguir sus vidas o a estancarse en ellas.
Al final tendrá que ser un grupo de niños, siete, víctimas de bullying y de otro tipo de acosos también, quien se embarque para tratar de que Pennywise no siga haciendo de las suyas. Con Bill a la cabeza, los chavales tratarán de vencer sus temores y pesadillas y hacer frente a una todavía mayor sacando lo mejor, pero también lo peor de sí mismos en ocasiones.
Basada en el bestseller del mismo título publicado por el prolífico Stephen King en 1986, llevado cuatro años después a la pequeña pantalla, «It» es una película de terror que lo que lo crea no es el monstruo asesino de otro mundo que aparece y desaparece a sus anchas, que mal rollo si da y que es muy desagradable, sino el tema del bullying y del acoso que he mencionado antes. Los niños protagonistas se hacen llamar El Club de los Perdedores y sufren, algunos tanto en el colegio como en casa, llevándolo con bastante entereza, todo sea dicho.
Porque claro, Pennywise les aterroriza, se los quiere comer al fin y al cabo, pero hay otros matones descerebrados que no dudan en golpearles, insultarles o rajarles si hace falta para demostrar su complejo de superioridad. Y de ahí que los niños acaben reaccionando de determinadas formas en un momento dado.
Está bien hecha «It» que en partes recuerda a una de esas películas que se hacían en los años ochenta en la que un grupo de chavales era el protagonista de la historia, aunque desde el principio está claro que esta aventura va a ser horripilante para ellos y que buen rollo no va a haber en casi ningún momento; pero a pesar de ello, de que su ambientación sea buena y del trabajo de los niños, particularmente no creo que sea ninguna maravilla.
Entretiene, sí, aunque a veces baja el ritmo para mi gusto y da mal rollo, mucho, porque Pennywise deja en pañales a muchos monstruos del género del terror por lo que puede hacer, pero vaya que se puede adivinar fácilmente cuándo van a suceder esos momentos susto e incluso prever antes de que ocurran qué es lo que puede suceder. Vaya que «It» ya la hemos visto con anterioridad, sin payaso pero con otro ente/persona y otros protagonistas, ya sean niños o adultos.
Mucho bombo se le está dando, dicen que es terrorífica aunque eso depende de lo impresionable que sea el espectador, pero a mí me ha decepcionado. Me esperaba más, algo no tan previsible quizá, algo que me sorprendiera. Pero «It» no lo ha hecho.
Diario de una Cinéfila 