En la Sección Oficial del Festival de Cine Fantástico de Bilbao también hay cabida para los cortometrajes a los que el público tiene opción de votar por su favorito, algo que siempre es de agradecer. En esta edición, nueve han sido los seleccionados para proyectar:
72℅
España 2017, 20’.
Unas personas provenientes de diferentes lugares esperan en el desierto a que una botella de agua se llene gota a gota para poder beber a turnos. La sed hace que poco a poco vayan cayendo. Buena fotografía y un subtexto totalmente deducible a cuenta de las sequías y de lo ya pasa en algunas zonas en la actualidad y lo que podría suponer que siga pasando. Pero se hace largo por tanta repetición.
Bailaora
España 2018, 15’.
Unos soldados llegan a la iglesia de un pueblo arrasado por una bomba atómica. Allí solo hay niños, están intactos y escondidos y para que los soldados no les hagan nada, otra niña (se supone) con la cara vendada se pone a bailar dejando a los soldados atónitos e inmersos en una actuación de la que también son partícipes. Simpático este cortometraje, fue de los que más me gustó de la sesión.
El Fotoviaje de Carla
España 2018, 6’.
Una mujer queda atrapada en unos rollos de película. Su novio nos cuenta su historia y cómo se le ocurre interactuar con ella hasta que decide que debe ir a buscarla. La narración en off nos cuenta todo a la perfección y la expresividad de la protagonista femenina ayuda mucho a transmitir el mensaje.
Le Jour dù Maman est Devenue un Monstre
Francia 2017, 23’.
Trabajando en una clínica veterinaria, una mujer acaba con las uñas de una tortuga clavadas y se irá convirtiendo poco a poco en anfibio mientras su hija se asusta más y más. Pero, debajo de todos esos cambios, está su madre. El corto empieza con un cuento y es es lo que visualmente se nos narra, un cuento con elementos de terror.
M.A.M.O.N. (Monitor Against Mexicans Over Worldwide)
Uruguay 2016, 5’.
Empiezan a llover mexicanos al otro lado del muro fronterizo entre México y Estados Unidos. Los mexicanos piden sus derechos porque llevan tiempo residiendo en su país vecino pero Donald Trump a los mandos de un robot gigante cuan Power Ranger con su apariencia hará de todo para no dejarles volver. Una crítica en toda regla con humor, mucho humor. Aún días después de verlo no se me quita el hilarante momento de la salvadora “ave María“ de la cabeza.
Milk
Canadá 2018, 10’.
Un niño se levanta por la noche y se pone a beber leche del cartón cuando su madre aparece como por arte de magia. ¿Pero es su madre? Porque además de comportarse de manera muy extraña, la luz de la habitación al fondo del pasillo se enciende y desde ella sale la voz de su progenitora. Mantiene bien el suspense hasta la revelación final, que para mí no funciona.
Minotauro
España 2018, 9’.
Un hombre (Ramón Langa) nos narra con su voz lo que cree que ha pasado y dirá a la policía cuando le pregunten cuando descubre que su mujer (Ana Álvarez), la hija de esta y el hermano del hombre han sido aparentemente asesinados. Su afición al alcohol es para él lo que ha conseguido que no recuerde nada. La voz de Langa es un gran aliciente para una historia con un genial giro en sus momentos finales.
Skickelsen (Out Of The Darkness)
Suecia 14’, 2017.
Un misterioso hombre con maletín y una especie de reloj antiguo se instala en un piso de un bloquede apartamentos. Parece que vigila a su vecina, una joven que le ayuda en un par de ocasiones al poco de llegar al lugar. Pero por mucho que la historia nos lleve a pensar que quiere hacerle algo, el objetivo del señor es diferente al que a priori parece. Muy buen cortometraje, mi favorito y por el que voté. Tiene tensión, te engancha desde su homenaje inicial a “El Exorcista” (The Exorcist) y está verdaderamente bien hecho.
RIP
España 2017, 16’.
Una mujer (Itziar Castro) y su marido (Josep María Riera) discuten a cuenta del funeral del segundo, que según su médico está a nada de morir, ese mismo día, de hecho, debería ser. Pero con gente en su casa esperando al sepelio y la mujer no queriendo decepcionar a nadie en el pueblo por el qué dirán, tratará de que su esposo muera, incluso con la ayuda de su suegra porque cómo van a cancelar todo si hasta las flores están pagadas. Muy divertido y bastante sangriento este corto de Caye Casas y Albert Pintó. De los mejores de la sesión, también.
Imágenes: FANT