País: España.
Año: 2021.
Director: Icíar Bollaín.
Guión: Icíar Bollaín, Isa Campo.
Intérpretes: Blanca Portillo, Luis Tosar, María Cerezuela, Urko Olazabal, Tamara Canosa, María Jesús Hoyos, Arantxa Eguren.
Duración: 115 minutos.
Suena el teléfono con insistencia en casa de Maixabel Lasa (Blanca Portillo) y en su reflejo en el espejo percibimos que sabe qué van a comunicarle. Corre el año 2000 y ese 29 de julio la banda terrorista ETA asesina a su marido Juan María Jauregui. Diez años después Instituciones Penitenciarias abre una serie de entrevistas entre víctimas de la banda y terroristas arrepentidos a las que Maixabel quiere acudir, aunque en su entorno no lo entiendan y su hija María (María Cerezuela) no quiera saber de ellas. Pero la mujer necesita respuestas, quiere saber por qué mataron Juan Mari.
Esta es la trama principal de “Maixabel” el último filme hasta la fecha de la genial Iciar Bollaín que también ha coescrito junto a Isa Campo. Lejos de centrarse en la figura de la viuda y directora en su día de Ayuda a las Víctimas del Terrorismo del Gobierno Vasco, la película nos muestra mediante los personajes de Ibon (Luis Tosar) y Luis (Urko Olazabal) el camino al arrepentimiento y al volver a poder vivir, de alguna manera, con uno mismo.
El largometraje tiene tres momentos cumbres, las dos entrevistas de Maixabel con los asesinos de su marido y el homenaje final a este último, Las dos primeras secuencias son largas y de guión excelente, no dan un momento de respiro y a veces son hasta incómodas; la tercera es un broche final a la película muy bien llevado a cabo que para mí tiene un potente mensaje.
“Maixabel” no pretende, obviamente, que sintamos lástima por los asesinos en ningún momento pero creo que es muy acertado que en el guión también se hable de las consecuencias del arrepentimiento y del rechazo a la sinrazón de lo que ellos siempre han denominado lucha armada. La escena de Ibon en su pueblo con un otrora buen amigo es muestra de ello.
La película está bien hecha y planteada, nos presenta a una mujer ejemplar, no se puede decir menos de Maixabel Lasa, y unas situaciones cercanas en el tiempo de la historia vasca y española. El reparto está muy bien escogido, para mi gusto, donde los dos intérpretes principales demuestran lo buenos que son, porque Blanca Portillo y Luis Tosar son dos de los mejores del país, pero donde destacan también otros más secundarios pero muy importantes como son María Cerezuela, el final de su primera escena es tremendo, Tamara Canosa que interpreta a Esther la mediadora de las entrevistas con una naturalidad pasmosa, y sobre todo quien para mí hace la mejor interpretación del filme, Urko Olazabal que tiene su momento de oro en la primera de las entrevistas con Maixabel. Lo hace tan bien que su arrepentimiento, con lenguaje corporal incluido, traspasa la pantalla.
Lo digo siempre porque lo sigo pensando Icíar Bollaín no tiene película mala en su filmografía y con “Maixabel” ha vuelto a ofrecernos una que nos remueve por dentro haciendo imposible que no nos emocionemos y que salgamos de la sala de cine pensando. Películas como esta, además, son muy necesarias y afortunadamente hoy en día se pueden hacer con libertad.
Recomendable.